miércoles, 21 de noviembre de 2012

Comunicado del CELE ante las VII Jornadas de la Disidencia


Con objeto del desarrollo de las VII Jornadas de la Disidencia, celebradas los días 16-18 de noviembre en Madrid, quiero comunicar mi agradecimiento a todos aquellos que, con su esfuerzo, su voluntad y su abnegado trabajo han conseguido mantener, si no superar, el nivel que desde hace tantos años tiene este evento que organiza el Círculo de Estudios de la Emboscadura. Hay que destacar que la puesta en escena de todas las conferencias, stands dedicados a la venta de libros y otro tipo de materiales y, lo que es más complicado, la invitación de los conferenciantes y ponentes, implican un trabajo que se extiende a lo largo de muchos meses antes de su celebración.
Hemos tenido a invitados de diversos orígenes, procedentes de distintos ámbitos, de Rusia, Italia, Suiza o Reino Unido, y al mismo tiempo también de España, y en este último caso han sido personalidades muy relevantes, destacados luchadores por la Verdad, la libertad y la justicia, líderes comprometidos que han dado ejemplo con sus vidas, con sus escritos y, sobre todo, con su inquebrantable voluntad de lucha, y que nos han ofrecido a través de sus palabras el ejemplo de compromiso y deber que tomábamos como lema durante estas jornadas.
Este agradecimiento también quiere hacerse extensivo al público, a quienes con su presencia hacen posible la celebración, año tras año, de estas jornadas celebradas por primera vez en el lejano 2006. Muchos de los asistentes hemos tenido que desplazarnos desde nuestros pueblos y ciudades, en muchas ocasiones situados a distancias importantes que conllevan cuantiosos gastos, fruto de los ahorros de todo un año. Esa es la voluntad que deviene de la asunción del compromiso y el deber, de las ideas firmes y la defensa de unos valores que creemos posibles y por los que debemos luchar, por encima de los obstáculos y dificultades, frente a los enemigos de la cultura y la libertad, frente a los enemigos de los pueblos y las naciones, frente a los enemigos de Europa.